Los bancos extranjeros siguen teniendo grandes dificultades para ganar dinero en España
Los bancos extranjeros han tenido muchos problemas históricamente para ganar dinero en el mercado retail español, con honrosas excepciones. Muchos han tenido que salir del mercado nacional y otros se han tenido que orientar exclusivamente a segmentos en los que estaban especializados.
Wizink quiere despedir a 144 empleados tras el varapalo de la sentencia del Supremo
Banco Pichincha vuelve a ampliar capital: ya lleva 54 millones en 2019 para tapar sus pérdidas
Los bancos extranjeros tienen una larga historia de fracasos en el mercado español. Muchas entidades internacionales que prueban suerte en nuestro país se han encontrado a lo largo de los años con problemas para rentabilizar su negocio, especialmente cuando se lanzan a competir al mercado retail, en el que las entidades españolas tienen una gran presencia y capilaridad. Grandes multinacionales bancarias han tenido que salir de España por la dificultad de ganar dinero en el mercado, como Barclays, que vendió su negocio a Caixabank en 2014, o Citibank, que hizo lo propio al vender su banca de consumo y minorista a Banco Popular en el mismo año.
La gran competencia en los segmentos de producto tradicionalmente más rentables -como las hipotecas- y los tipos negativos que ya llevan muchos años instalados en la Zona Euro, unido a la continua inseguridad jurídica por los frecuentes varapalos de los tribunales, hacen que año tras año muchas entidades financieras extranjeras no presenten buenos datos.
Los resultados anuales de la banca publicados esta semana por la Asociación Española de Banca (AEB) muestran un año más cómo un número notable de entidades internacionales no alcanzan la rentabilidad, por lo que las que sobreviven, que son unas cuantas, lo hacen especializadas sobre todo en un segmento pequeño del mercado, como la banca de inversión o de empresas.
Una importante excepción es ING Bank, que tras 20 años en el mercado español ha conseguido posicionarse como un banco retail con una buena cuota de mercado tanto en hipotecas como en nóminas. El banco neerlandés comunicó en marzo que ganó 186 millones de euros en España y Portugal y se acerca a los 40.000 millones tanto de préstamos como de depósitos. Y todo ello pese a tener la forma jurídica de sucursal de un banco extranjero, y no estar constituido formalmente como entidad jurídica española, por lo que sus clientes están sujetos al fondo de garantía de depósitos de los Países Bajos.
Bancos con ERE
Varias entidades extranjeras han anunciado expedientes de regulación de empleo (ERE) en los últimos meses, atenazadas por la escasa rentabilidad.
Uno de los ejemplos es Targobank, propiedad del francés Crédit Mutuel. Esta entidad anunció el pasado noviembre hasta 180 despidos y el cierre de cuarenta oficinas en España. Su dirección comunicó a los trabajadores, tal y como informó este periódico en su día, «una importante deficiencia en provisiones y una cartera de clientes reales muy inferior a la esperada, con una red de oficinas mal ubicada».
Según los datos publicados en AEB esta semana, Targobank ha perdido 37 millones tras tener que meter 10 millones de euros en provisiones.
Otro ejemplo de estos problemas en el mercado español lo ha dado este mismo viernes Wizink, banco especializado en tarjetas de pago aplazado y propiedad del fondo estadounidense Varde Partners. Con 1.200 empleados, Wizink ha anunciado un ERE para 144 empleados después de que el Tribunal Supremo diera un golpe al principal producto que comercializaba la entidad: las tarjetas revolving, que el Alto Tribunal calificó de usura para tipos de interés superiores al 20%.
Aunque Wizink espere unos resultados malos durante ese año, a los que se intenta adelantar con su ajuste, el año pasado sí consiguió ganar dinero, antes del ‘sablazo’ del Tribunal Supremo, con beneficios de 37 millones de euros.
De Ecuador o Andorra
De entre el resto de entidades extranjeras que están registradas en la AEB con ficha bancaria española hay otra cuantas que tampoco vienen consiguiendo buenos resultados. Una de ellas es Banco Pichincha, el grupo bancario ecuatoriano que lanzó en 2018 su marca Pibank y que está actuando con mucha agresividad para tratar de captar clientes en sus ofertas muy atractivas tanto en sus cuentas remuneradas, depositos o hipotecas. Pichincha perdió 9,4 millones en 2019, empeorando mínimamente los poco más de 9 millones que perdió en el año anterior.
La entidad americana ya realizó varias ampliaciones de capital el pasado año por valor de 54 millones de euros para conseguir cubrir las pérdidas de su actividad operativa.
En otro target totalmente distinto se coloca Andbank, la banca andorrana que se especializa en banca de inversión, que ha lanzado MyInvestor para sus productos plenamente digitales orientados al segmento alto, pero cuya actividad general perdió 4,3 millones de euros después de perder 3,69 millones durante 2018.
Desde Andbank se ha puntualizado que este es el resultado individual, y que el resultado consolidado arroja un beneficio de 10,90 millones de euros. El motivo es que el resultado individual incluye, debido a normativa de Banco de España, 9,54 millones de euros de gasto no desembolsado en el ejercicio por amortización de fondo de comercio originado en las compras del negocio retail de Inversis Banco y del Grupo Merchbanc, ha puntualizado la entidad andorrana.
En el ámbito de la banca de inversión, también el pequeño banco de inversión Degroof Petergam, de Bélgica, perdió 4,86 millones a pesar de su pequeño volumen de activos con solo 28 millones de euros.
Grandes mundiales
Respecto a la gran banca de inversión mundial que opera en España la mayoría como sucursales de las matrices que están en el exterior (es decir sin constituir una entidad con ficha bancaria española), entidades como JP Morgan Chase Bank también ha perdido una cantidad ínfima de dinero en 2019 en España.
Por su parte, Société Générale tuvo un resultado neto de operaciones financieras de más de 100 millones en negativo. Sin embargo, fuentes del mercado aseguran que los resultados de la entidad en 2019 tuvieron beneficios y que no se puede estimar completamente cómo han sido los resultados del banco de inversión francés en España tan sólo con los datos que publica a través de la AEB.